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 Índice 
 Texto íntegro 
Acta literal de los debates
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Miércoles 18 de diciembre de 2024 - Estrasburgo

Preparación de la reunión del Consejo Europeo de los días 19 y 20 de diciembre de 2024 (debate)
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  Iratxe García Pérez, en nombre del Grupo S&D. – Señora presidenta, señora presidenta Von der Leyen, la semana pasada tuve la oportunidad de viajar a Ucrania por segunda vez. Mi visita tuvo un objetivo claro: reafirmar al presidente Zelenski y a su Gobierno nuestro apoyo y evaluar las necesidades urgentes de Ucrania en su defensa contra el régimen criminal de Putin.

Señorías, sabemos que Ucrania atraviesa uno de los momentos más difíciles desde febrero de 2022. Rusia golpea salvajemente infraestructuras civiles para someter al pueblo ucraniano al frío y a la oscuridad, y recurre al uso de armas con potencial nuclear. Fuerzas norcoreanas apoyan a Rusia en la región de Kursk y los misiles y drones iraníes aterrorizan a civiles y golpean ciudades sin descanso.

Pero, pese al sufrimiento de Ucrania en el campo de batalla, las autoridades ucranianas no contemplan un alto el fuego. El mensaje que me han trasladado el presidente Zelenski, el primer ministro y otros miembros del Gobierno es rotundo: no quieren ayuda para negociar, quieren que les ayudemos a alcanzar la paz a través de una posición de fuerza que obligue a Putin a negociar. Quieren ayuda para ganar la guerra, porque están convencidos de que ganarán la guerra, porque saben por lo que están luchando. Están luchando por la paz, por la seguridad y por la prosperidad de sus hijos.

Señorías, no podemos pasar a la historia como Chamberlain. Abandonar Ucrania a su suerte sería caer en el mismo error que cometió el primer ministro británico en 1938 al entregar Checoslovaquia a Hitler. Quienes piensan que sacrificando a Ucrania pueden salvaguardar la paz mundial cometen un error. Porque Putin, al igual que Hitler, no se detendrá. Y si Putin triunfa en Ucrania, ¿qué destino le espera a Moldavia o a Georgia? ¿Hasta dónde llegarán los actos de interferencia y de sabotaje de Putin?

La guerra de Rusia contra Ucrania no es una crisis aislada, es la antesala de una pugna global entre los regímenes autoritarios y las democracias. Y ya no podemos resguardarnos en el paraguas de seguridad de los Estados Unidos.

Ha llegado la hora de la Unión Europea. Ha llegado el momento de asumir nuestro destino y hacer lo necesario para que la paz que busca Trump no sea una capitulación, para que la crueldad autoritaria no triunfe y amenace el presente y el futuro de nuestras democracias.

El presidente Zelenski y su Gobierno quieren que cumplamos con nuestros compromisos. Ucrania necesita urgentemente más defensas aéreas, más munición, más armas de largo alcance. Necesitan que ejecutemos el 15.º paquete de sanciones. Y también necesita que confisquemos los 200 000 millones de euros en activos congelados rusos para reconstruir el país y seguir desarrollando su industria de la defensa.

Señorías, el pasado noviembre conmemoramos los treinta y cinco años de la caída del Muro de Berlín. Aquel momento marcó el final de la Guerra Fría y el nacimiento de un nuevo orden mundial. Aquella esperanza de un mundo basado en la cooperación, el multilateralismo, la paz y la prosperidad se desvaneció con la cruel invasión de Rusia contra Ucrania.

Pero treinta y cinco años después, también he visto lo que nunca pude imaginar. En Kiev he visto una Ucrania valiente, he visto una Ucrania candidata a ingresar en la Unión Europea, he visto una Ucrania firmemente comprometida con los valores europeos. Y créanme, señorías, si somos valientes nuestra historia no terminará como la de Chamberlain en la Segunda Guerra Mundial; nuestra historia, la historia de Ucrania y la Unión Europea, terminará como miembros de la misma familia.

 
Última actualización: 20 de diciembre de 2024Aviso jurídico - Política de privacidad